(Foto: Rullot)VEA LAS FOTOS DE RULLOT DEL FESTEJO
La ganadería de Nazario Ibáñez ha vuelto a triunfar en otra plaza importante. Si el pasado 1 de mayo lidió una novillada de éxito en Madrid, hoy ha sido en Valencia donde el hierro yeclano ha echado hasta cinco novillos de muchas opciones. Unas veces por el viento, otras por la falta de acople de los novilleros y otras por el fallo con los aceros, el caso es que Cayetano García, Emilio Huertas y Juan Ortega se fueron de vacío y los utreros de Ibáñez se marcharon con las orejas puestas al desolladero.
Así vivimos, toro a toro, la narración del festejo:
Abrió plaza en la novillada que cierra la miniferia de la Virgen de los Desamparados en Valencia un bonito colorado de Nazario Ibáñez que dio un gran juego por la profundidad, repetición y calidad en sus embestidas. Cayetano García, a pesar del fuerte viento que está dificultando la lidia de los toreros, dejó detalles de su personal concepto del toreo pero no llegó a cuajar al astado, sufriendo algunos enganchones que deslucieron su labor. Mató de pinchazo y estocada y fue ovacionado.
El segundo fue otro novillo bien hecho, con la cara ‘palante’. Emilio Huertas, que protagonizó un variado recibo de capa -después la cuadrilla se desmonteró en el tercio de banderillas-, inició bien la faena de muleta toreando por abajo. El novillo embistió con transmisión, con el defecto de salirse sueltecito del muletazo. Huertas, más toreado que su compañero anterior, acertó a sujetarlo y le dio fiesta por los dos pitones. El final de faena, más metido con el toro, fue de torero cuajado y maduro. Mató de estocada caída.
El tercero, de espectacular pelaje, manseó en los primeros tercios. Le pegaron mucho en varas y sembró el desconcierto en la lidia, llegando al último tercio con una deslucida condición, gazapón y sin clase. Juan Ortega tampoco acertó a llevarlo tapado, aunque el viento tampoco se lo puso fácil. Faltó ligazón. Mató de pinchazo hondo y dos golpes de descabello.
El cuarto no acabó de definir su comportamiento en los primeros tercios y Cayetano García toreó con más voluntad que lucimiento con la capa. El de Nazario rompió a embestir bien de verdad en la muleta, por abajo, entregado y con transmisión. Faltó gobierno y mando en la muleta del torero, acabando rajadito el de Nazario después de embestir más de treinta veces con importancia. Lo mejor fue una serie a izquierdas. Estocada trasera y mal con el descabello. Lote importante el que se ha llevado el hijo del matador Julián García en Valencia.
El quinto, suelto de salida y repuchándose en los caballos, cuando se quedó solo con el torero, aunque tardeó, también embistió pero yendo a menos. Emilio Huertas, que fue volteado sin consecuencias, echó raza ante su oponente, que fue exigente mientras duró. Finiquitó al animal de dos pinchazos y estocada.
El sexto fue otro novillo noble y repetidor, siendo una lástima que se aburriera pronto y buscara tablas. Juan Ortega anduvo académico con él, mostrando un corte de torero clásico. Lo mejor, el inicio de faena por abajo. Con el novillo a menos, el torero, muy inteligente, se metió entre los pitones llegando a los tendidos. Muy mal con los aceros, el tercer aviso estuvo muy cerca.
Valencia, 13 de mayo de 2012. Novillos de Nazario Ibáñez, bien presentados y de muy buen juego salvo el deslucido tercero. CAYETANO GARCÍA: Ovación tras aviso en ambos; EMILIO HUERTAS: Ovación y ovación tras aviso; y JUAN ORTEGA: Ovación tras aviso y silencio tras dos avisos. Entrada: Un cuarto. Se desmonteraron tras parear al segundo José Otero y Diego Valladar.
