(Foto: Javier Arroyo)Conchi Ríos, desbordada por el viento y la encastada condición del sobrero de Couto de Fornilhos que abrió plaza, fue también silenciada en el que hizo cuarto; Tulio Salguero, sin opciones con el deslucido segundo, no terminó de acoplarse con el quinto.
Corralejo, traumatismo toracoabdominal de pronóstico reservado
VEA LAS FOTOS DE JAVIER ARROYO DEL FESTEJO
LA OPINIÓN DE PACO MORA: “El mundo al revés”
VEA EL VÍDEO RESUMEN DEL FESTEJO
Accidentado inicio de la primera novillada de la Feria de San Isidro. El utrero que abrió plaza, con el hierro titular de Buenavista, persiguió en el primer tercio a un desarmado Raúl Corralejo -banderillero de la murciana Conchi Ríos- que perdió pie al llegar a las tablas cayendo bajo del estribo y librándose, afortunadamente, de la cornada del animal que, con gran violencia, se estrelló contra las tablas partiéndose los dos cuernos. El de plata pasó por su propio pie a la enfermería para ser reconocido tras el susto y la paliza. En lugar de la lastimada res de Clotilde Calvo salió un encastado sobrero de Couto de Fornilhos que sacó movilidad, transmisión e interés en sus embestidas. La torero, muy molestada por el viento, se vio desbordada por el utrero en una faena mucho más voluntariosa que lucida. Mató de un feo bajonazo y requirió del uso del descabello.
Tulio Salguero no tuvo ninguna opción de brillar con el que hizo segundo, del hierro de Buenavista, un ejemplar que no tuvo ninguna clase, que embistió siempre punteando y con la cara muy suelta. Se justificó el joven diestro, a quien el viento también molestó durante toda la lidia.
El colorado chorreado que hizo tercero, de reunida y engatillada cornamenta, sacó nobleza y humilló en el último tercio, aunque mostró varias veces clara tendencia a irse a tablas. Ante él, Gonzalo Caballero, que inicio su labor por estatuarios, con varios remates por bajo, un molinete y un pase de pecho que metieron a la gente en la faena, se mostró más sereno y cuajado que en su reciente debut en Sevilla, dejando varios muletazos templados que evidenciaron su buen concepto del toreo. Estuvo a punto de ser prendido también en varias ocasiones, algo que ayudó al público a seguir conectado a la faena, pero no se arredró el torero, que quiso y se entregó con frescura en todo momento. Terminó por manoletinas y mató de una soberbia estocada. Cortó una oreja.
El serio burraco que hizo cuarto, remiendo de Fernando Peña, embistió con transmisión en la primera y decidida serie de derechazos ejecutada por Conchi Ríos, pero lo que apuntaba a faena interesante quedó pronto en un simple espejismo pues el animal comenzó a protestar y a pararse y la novillero, percatada del cambio en la condición del toro, desistió pronto. Además, como en su primero, no mató bien. En su turno de quites, Tulio Salguero fue volteado al torear por gaoneras. Una vez repuesto del susto, volvió a quitar por el mismo palo ganándose la ovación del público.
Arrancó la faena de muleta ante el quinto Tulio Salguero con dos ajustados pases cambiados, aguantando impertérrito el fuerte galope del novillo. Luego no terminó el torero de acoplarse con el astado que, sin ser bueno, sí mereció mejor trato durante la lidia y se dejó en el último tercio. Pinchó antes de dejar una estocada corta contraria y perpendicular.
No pudo redondear la tarde Gonzalo Caballero ante el sexto, que fue excesivamente picado en el caballo y llegó aplomado y sin transmisión ni recorrido al último tercio. Se justificó ante él el torero, que volvió a manejar con acierto el acero.
Madrid, 14 de mayo de 2012. Novillos bien presentados de Buenavista, deslucido el 2º, bueno el 3º, manejable el 5º; Fernando Peña (4º y 6º), el 4º deslucido y el 6º aplomado; y Couto de Fornilhos (1º bis), encastado. CONCHI RÍOS: Silencio tras aviso y silencio; TULIO SALGUERO: Silencio y silencio tras aviso; y GONZALO CABALLERO: Oreja y ovación de despedida. Entrada: Más de tres cuartos. Corralejo fue atendido en la enfermería de un “traumatismo toracoabdominal de pronóstico reservado” que “le impide continuar la lidia”, según el parte facultativo. Paco Chaves se desmonteró tras parear al quinto.
