Magistral actuación en sus dos toros de Pablo Hermoso que cortó dos orejas del cuarto. Le acompañó a hombros Armendáriz, que salió a darlo todo en el sexto y que se llevó una merecida recompensa. Galán abandonó a pie la plaza con un único trofeo, pese a que pudo hacerlo en volandas con sus compañeros de no ser por la presidencia.
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Segundo festejo de la Feria del Toro de 2013 y segunda vez que se abre la puerta grande. En esta ocasión para ver salir en hombros a dos jinetes de la tierra: Hermoso y Armendáriz.
Pablo Hermoso, que vistió su cuadra con los colores de San Fermín, así como las banderillas, escogió para abrir su actuación a “Disparate”, con el que resbaló después de poner el rejón de castigo tras empujarle el toro por los cuartos traseros y cayó al suelo siendo prendido el caballo por el de San Pelayo de manera aparatosa pero afortunadamente sin consecuencias. Fue sustituido para poner banderillas por “Chenel” con el que lució en el galope a dos pistas rematando por los adentros y con batidas perfectas de frente. Con “Ícaro” pisó terrenos comprometidos, exponiendo y transmitiendo emoción a los tendidos en todo momento. Cerró con una serie lucida de tres cortas con “Pirata” pero erró con el rejón de muerte, perdiendo los trofeos de una gran actuación.
Sergio Galán recibió al segundo con “Uranio”, antes de brillar a lomos de “Ojeda”, con el que supo aprovechar la nobleza y la buena embestida de su oponente y yendo de frente en las banderillas. Sin embargo al toro le abandonaron las fuerzas y llegó justo al final cuando el jinete de Cuenca sacó a “Apolo” en banderillas. Acabó con las cortas y un efectivo rejón de muerte con “Charro”. El público le pidió la oreja, pero el palco no la concedió.
Roberto Armendáriz, que lucía un brazalete en recuerdo de su padre fallecido las pasadas navidades y al que brindó la faena, se llevó un susto de salida al estar a punto de ser prendido por el de Capea. El navarro fue de frente en banderillas y arriesgó cabalgando a “Prometido”, con el que puso al público de su parte ante la falta de colaboración de su rival, que manseó y acabó echándose al piso hasta en dos ocasiones en la parte final. “Trasnochador” fue el caballo elegido para despachar a un animal metido en tablas y sin ganas de colaborar. Saludó una merecida ovación.
Pablo Hermoso sacó para recibir al cuarto a “Barullo”. Ya a lomos de “Van Gogh” puso emoción con quiebros inverosímiles batiendo en la cara a pitón contrario del de San Pelayo, llegando muy cerca y exponiendo, llevando la emoción a los tendidos. Con una serie de piruetas sobre “Manolete” despertó al público y con “Pirata” se pegó un arrimón con desplantes antes de colocar un lucido par de cortas a dos manos que puso al público de pie. Rubricó con un gran rejón de muerte y el toro dobló en los medios. Pañuelos rojos al aire de Pamplona y dos orejas y puerta grande para Hermoso… y ya van 16.
Sergio Galán se llevó una oreja que pudieron ser dos del quinto, en una faena que fue de más a menos y en la que levantó al público pamplonica de sus asientos a lomos de “Vidrié” y, sobre todo, de “Apolo”, con el que toreó brillantemente a su oponente con la grupa.
Con el que cerraba plaza, el más pesado de la tarde con 653 kilos, Armendáriz salió a darlo todo y se llevó los aplausos de los suyos primero sobre “Delirio” y posteriormente con “Zamorino” en un tercio de banderillas en el que batió de frente y acortó las distancias. Su posterior acierto con el rejón de muerte le sirvió para abrir por segundo año la puerta grande de Pamplona y abandonar a hombros su plaza junto al otro navarro.
Viernes 6 de julio. Toros de El Capea para HERMOSO DE MENDOZA: Ovación y dos orejas; SERGIO GALÁN: Ovación y oreja; ROBERTO ARMENDÁRIZ: Ovación y dos orejas. Entrada: Lleno de “No hay billetes”.
