(Foto: Arjona)(Foto: Arjona)

Emilio Muñoz: “Me he vuelto a sentir, el bicho ha despertado”

El trianero torea en el campo: "Me he quitado un montón de años y he vuelto a pecar, creía que no era capaz…"
Redacción APLAUSOS
domingo 16 de febrero de 2014

Emilio Muñoz ha vuelto a torear en el campo. Lo ha hecho, entre otros sitios, en la ganadería de Murube, tentadero al que pertenecen las dos imágenes de Arjona que ilustran esta noticia. Aunque el trianero asegura que no piensa en el traje de luces, afirma que, toreando, ha vuelto a sentirse “vivo”, subraya que se ha quitado “un montón de años” de encima y confiesa que “el bicho” ha vuelto a despertarse.

Así lo cuenta esta semana Manolo Molés en su página de opinión de la edición impresa de APLAUSOS:
 
Les pasa a muchos. Y si le pasa a Emilio es que les pasa a todos. Emilio, el maestro Muñoz, mi amigo, tan buen torero con todas las fases de la luna, con todos los planetas del universo taurino en conflicto artístico en su alma torera, dijo adiós y ahí os quedáis. Y yo pensé que el de Triana, que tiene dos cojones y una cara como pintada por El Greco cuando se le cruzan los cables, no iba a tener tentación alguna que le doblegara en su rectitud. Pero el otro día me dijo: “Siéntate Manuel y te cuento algo, pero no lo cuentes… bueno te lo voy a contar aunque sé que pasado mañana ya lo sabe todo el mundo porque no te callas nada…”. Emilio me lo contó mirándome como si yo fuera su espejo: “Manuel, he vuelto a torear en el campo…”. No me jodas Emilio, pero no me dejó acabar: “…Y lo más grande es que me he vuelto a sentir, que el bicho se ha despertado y que he disfrutado y que soy feliz…”. Eso, Emilio, quiere decir que… “De momento quiere decir que me siento vivo. No pienso en el traje de luces pero me he quitado un montón de años y he vuelto a pecar, creía que no era capaz…”.

No le pregunté más. No volverá, creo, porque es un tipo serio, cabal y pudoroso. O al menos lo era. Pero yo hacía tiempo que no le veía tan risueño, tan abierto, tan torero… Joder… que alguien analice el virus de la torería porque, digan lo que digan, todos caen, todos palman soñando la faena de mañana. Gente grande y diferente. Nunca se van…

Lea AQUÍ el artículo completo en su Revista APLAUSOS

Síguenos

ÚLTIMAS NOTICIAS

Cargando
Cargando
Cargando
Cargando
Cargando
Cargando
Cargando
Cargando