Leer una noticia

El agujero negro de la comunicación

Carlos Ruiz Villasuso
miércoles 23 de julio de 2014

No sé muy bien la razón, pero existe una quiebra entre la plaza y el encierro. Entre los corredores, en gran número, percibo un desapego hacia el toreo. Es más, hay una especie de elitismo entre los corredores.

No sé muy bien la razón, pero existe una quiebra entre la plaza y el encierro. Algo que no existe de forma individual, sino como causa y efecto, se vive, se expresa y hasta se verbaliza en lenguajes distintos, como deseando separar el encierro de la corrida de toros. Entre los corredores, en gran número, percibo un desapego hacia el toreo, a lo que sucede intramuros cada tarde, con más de 20.000 personas presenciando en directo la corrida. Es más, hay una especie de elitismo entre los corredores, que tratan de buscar un elemento diferenciador superior basado en el desapego y hasta en el desafecto hacia la corrida de toros.

Para esta élite, el corredor “puro” ha de ser un alejado del ruedo. Hablando con corredores navarros y de otras ciudades de España, entre ellos no hay quórum sobre ciertas propuestas o realidades actuales: vestir de blanco y rojo o no, salir en los medios o no, formar “marcas” individuales como protagonistas o ser anónimos, admitir o no asuntos tan evidentes como el de la masificación, admitir o no las normas de seguridad que cada año proponen los políticos en bandos y normas, criticar o no que los toros cada vez corran más porque se preparan en las ganaderías de cara el encierro, y, si me apuran, debatir entre ellos la solidaridad de gentleman que siempre ha formado parte de la condición de corredor. En realidad se trataría de un debate entre quienes aún creen que los Sanfermines son los encierros “de” Pamplona y los encierros “en” Pamplona, que no es lo mismo.

"" LEA EL ARTÍCULO COMPLETO EN LA REVISTA APLAUSOS

ÚLTIMAS NOTICIAS

Cargando
Cargando
Cargando
Cargando
Cargando
Cargando
Cargando
Cargando