Antonio Ferrera asume el reto de encerrarse esta tarde en La Malagueta frente a seis toros de Miura. Uno de los acontecimientos de la temporada. “Me apetecía hacerlo, mi instinto personal me ha impulsado a compartir mis sentimientos con el público y Miura puede servir para reflejar una madurez y un estado de ánimo. No le doy muchas más vueltas a las causas, era el momento y ahora toca dar la talla”, asegura el torero en una entrevista publicada en la edición impresa de Aplausos. Para Ferrera, más allá de los trofeos, cada detalle que suceda en la plaza tendrá su importancia: “Miura es una ganadería imprevisible y ese matiz da grandeza a la tarde. Más allá del comportamiento de los animales. Será una tarde para impregnar el corazón a todo cuanto uno haga en la plaza. Unos toros ayudarán más y otros menos, pero el sentimiento debe aflorar en todos ellos”.
Ferrera será el séptimo matador de alternativa que reta a la leyenda. “Me importa saber que voy a recorrer un camino que han andado otros compañeros. Sus tardes fueron leyenda, una referencia para mí. Continuar su vereda es también un sueño que tengo desde niño. Afronto esa continuidad con toda la ilusión del mundo. Espero estar a la altura”, concluye.
Lea AQUÍ la entrevista completa en su Revista APLAUSOS Nº 1924