MADRID.- HABLAN LOS PROTAGONISTAS
(Foto: Javier Arroyo)(Foto: Javier Arroyo)

Alejandro Talavante: “Las sensaciones han sido tremendas”

“No se la veía al toro por ningún lado pero si lo hubiera pensado no se lo hubiera hecho”, afirmó el extremeño sobre la arrucina de rodillas en el quinto de la tarde
Redacción APLAUSOS
viernes 29 de mayo de 2015

Finito de Córdoba valoraba de la siguiente manera en los micrófonos de nuestros compañeros de Canal Plus Toros la faena al primer toro de la tarde: “Tenía un problema de visión, estábamos tratando de cuidarlo pero quería exigencia por abajo. El inicio de faena ha sido crucial y he podido disfrutar”. El torero se descaró durante el transcurso de la faena con un sector del público. “No entiendo este tipo de público, cuando un sector minoritario te dice esas cosas. Hoy no he tenido un gesto feo hacia ellos, pero sí pidiendo respeto. Nos jugamos mucho, la vida. Que me piten después de, pero durante no. No entiendo esta gente en una Maestranza de Sevilla“.

Tras pasaportar al cuarto toro de la tarde, Finito de Córdoba expresó: “Se le han hecho las cosas bien durante la lidia. La querencia suya era la de chiqueros pero ha tenido cosas buenas. No ha molestado en ningún momento, aunque no transmitía”.

Alejandro Talavante valoró de esta forma al primero de su lote: “Tenía virtudes como la transmisión. A veces venía descontrolado y fuerte pero con temple he intentado exponerle. He visto al toro rápido y Madrid te pide eso. La pena ha sido la espada”. Ante el quinto dejó una faena de pura pasión e inspiración: “Me he quedado alucinado. Creía que por el sainete que he pegado con la espada era para llamarme de todo. Hacía mucho tiempo que no sentía Madrid así. Aunque las orejas cuentan, las sensaciones han sido tremendas. La arrucina no se la veía al toro por ningún lado, pero era el último de la feria y he salido con toda la actitud. Ahí me he dejado llevar. Si lo hubiera pensado no se lo hubiera hecho”.

Daniel Luque sufrió en el tercero un tremendo volteretón. “No sé por dónde ando todavía. Era un toro para apostar, exigente, pero lo ha visto rápido el público. Había que exponerle. En los estatuarios me ha ido derecho. La espada ha sido una pena”.

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