Inédito Morante y cumplidor Perera, que pierde la oreja de su primero con la espada.
FOTOS DE JAVIER ARROYO DEL FESTEJO
Fotos: JAVIER ARROYO
Abrió plaza un toro hondo pero lavado de cara, que tuvo nobleza pero muy poca fuerza. No tuvo ninguna opción Morante, que dejó un par de lances y media de salida y luego abrevió con la muleta frente al derrengado ejemplar entre las protestas del público. Mató de estocada y fue silenciado. El cuarto fue devuelto por flojo a los corrales, saliendo en su lugar un sobrero del mismo hierro que fue igual de inválido. O más. Sin embargo, éste no se devolvió y Morante optó por abreviar de nuevo, siendo silenciado.
El segundo fue un toro de buena condición, que tuvo nobleza pero anduvo muy justo de raza y fuerza. Perera estuvo templadísimo con él en una faena en la que se mostró muy por encima del animal. Supo sostenerlo con pulso, temple y limpieza sobre ambas manos y perdió un posible trofeo con la espada, pues mató de pinchazo, estocada y dos descabellos, siendo silenciado. El quinto fue un inválido al que fue imposible darle un pase. Perera se lo quitó rápido de en medio entre las protestas del público.
El tercero fue un toro que se movió sin clase, siempre con la cara alta, muy justo de fuerza y de raza también. Cayetano lo recibió a portagayola con una larga cambiada y luego realizó una faena de mucho tesón, en la que quiso pulsear mucho al toro y logró momentos estimables por el pitón izquierdo. Mató de estocada baja, la petición fue insuficiente y saludó una ovación. Cerró plaza un toro manejable aunque justo de fuerza y de raza como toda la corrida. Cayetano tapó con arrestos todos los defectos del animal. Lo recibió con una larga de rodillas y ejecutó después una faena muy entregada, metido con el toro, llegando al público y sin dejarse nada atrás. Hubo buenos naturales, muletazos mirando al tendido, otros rodilla en tierra… todo dentro de una labor animosa y valiente. Mató de estocada y logró el único trofeo del festejo.
Burgos, 29 de junio de 2015. Toros de La Palmosilla, el 4º devuelto por flojo y sustituido por un sobrero del mismo hierro. Musculados pero lavados de cara y muy deslucidos, sin fuerza ni raza y con varios inválidos como el 4º bis y el 5º. De mejor condición el 6º. Morante de la Puebla, silencio en su lote; Miguel Ángel Perera, silencio tras aviso y silencio; y Cayetano, ovación tras petición y oreja. Entrada: Lleno. Al iniciarse el paseíllo sonó el himno de la ciudad en el día de San Pedro.
