Clemente paseó un trofeo mientras que Francisco José Espada saludó una ovación frente al cuarto.
GALERÍA FOTOGRÁFICA DE JAVIER ARROYO
Fotos: JAVIER ARROYO
Joyero, el primer astado de la Feria de Begoña 2015 fue un dechado de bravura en varas, derribando en el primero de los tres encuentros con el piquero. Francisco José Espada basó su irregular trasteo en la diestra. Al natural tampoco tomó vuelo la faena. Finalizó con circulares y manoletinas antes de fallar con la espada. El cuarto resultó un novillo enclasado que permitió a Espada instrumentar un trasteo lucido que alcanzó sus mejores momentos cuando le dio sitio y lo llevó largo al natural. Volvió a mostrarse encimista en el final de faena. Un pinchazo y una estocada caída se llevaron el posible apéndice.
Clemente paseó una oreja del segundo, un novillo al que saludó con gusto a la verónica. Cumplidor en varas el mayalde. El francés le cogió el aire al novillo sobre ambos pitones, mostrando su toreo vertical y ligado. A medida que avanzó el trasteo fue bajando la mano, consiguiendo los mejores momentos de su actuación. Se inspiró por giraldillas antes de cobrar una estocada entera y desprendida. El quinto no sacó las virtudes de sus hermanos. Brindó Clemente al ganadero Rafael Finat y exhibió firmeza de plantas para darse un arrimón tratando de lograr el triunfo. Dos pinchazos previos a una estocada en lo alto le impidieron redondear la noche.
Babieca, otro buen novillo de Mayalde al que Luis David Adame recibió con tres largas cambiadas en el tercio, fue el que hizo tercero. Tras un buen puyazo quitó por chicuelinas de mano baja, cordobinas y el remate del abanico. Fácil en banderillas. Tras brindar a la marquesa de Vega de Anzo instrumentó dos péndulos en el platillo, que dieron paso a una interesante faena en la que el temple del mexicano sobresalió en todo momento. Terminó con manoletinas y tras agarrar una estocada en buen sitio, cortó las dos orejas.
Al sexto, Afrancesado de nombre, Luis David Adame lo recibió con una larga cambiada y un ramillete de verónicas. Un quite por zapopinas y la gente se entregó al mexicano antes de lucirse de nuevo con los rehiletes. Clavó arriba. Brindó al respetable y al igual que en su primero toreó templado y reunido sobre ambas manos, conectando con fuerza con los tendidos. Unas bernadinas finales y una estocada tirándose a ley en todo lo alto dieron paso a dos merecidas orejas que paseó entre el clamor del público.
Gijón, sábado 8 de agosto de 2015. Novillos de Conde de Mayalde, de correcta presentación y notable juego excepto el deslucido quinto. El primero, bravo en varas, aplaudido en el arrastre. Segundo y tercero, buenos, ovacionados en el arrastre. Enclasado el cuarto. Deslucido el quinto. Francisco José Espada, silencio y ovación con saludos; Clemente, oreja y silencio; Luis David Adame, dos orejas y dos orejas. Entrada: Más de media plaza. El mayora del Conde de Mayalde fue obligado a saludar desde los medios.
