GALERÍA DE FOTOS DE EVA MORALES
Muy bien comenzó la tarde con una faena de gran elegancia y torería de Finito de Córdoba, que dejó pinceladas de enorme sabor. Su segunda obra fue un monumento al arte del toreo, una lección del bien torear cargada de arte y sentimiento.
Juan José Padilla formó un auténtico lío al segundo de la tarde, en una faena muy completa de principio a fin, de gran calado en el tendido, y que fue premiada con el rabo. Dos orejas paseó también de su segundo, un toro venido a menos.
Manzanares puso el temple, la despaciosidad y majestuosidad en su labor al tercero. Faena de perfume caro, premiada con la oreja. Sacó recursos y técnica frente al complicado sexto, al que acabó sometiendo.
Sanlúcar de Barrameda. Toros de Juan Pedro Domecq, el 2º devuelto por otro del mismo hierro al partirse una pata; nobles y manejables en general. Finito de Córdoba: Oreja y dos orejas; Juan José Padilla: Dos orejas y rabo, y dos orejas; Manzanares: Oreja en ambos. Entrada: Más de tres cuartos.