CORRIDAS GENERALES

Juan del Álamo: “El toro ha sido un gran colaborador”

"Había que apostarle, llevarle y empujarle y lo he hecho", expresa el salmantino tras tocar pelo en Bilbao
Redacción APLAUSOS
lunes 24 de agosto de 2015

Morenito: “Cuando uno quiere tanto y lo da todo, tenían que ayudar más las cosas”

Adame: “La faena a mi primero ha sido importante”

“Al toro había que apostarle, llevarle y empujarle y lo he hecho. Me he abandonado en algunos momentos y he disfrutado. El toro ha sido un gran colaborador, te lo pedía todo por abajo, muy profundo y tirando de él. Lo que ha durado lo he disfrutado y saboreado. Estoy contento porque cuando las plazas no están completamente llenas, como hoy, es muy difícil triunfar”. Así se expresaba Juan del Álamo a través de los micrófonos de Movistar Plus Toros tras pasear la oreja del tercer toro de la tarde en Bilbao. No pudo redondear frente al sexto: “De mitad muletazo en adelante protestaba mucho. Era pronto pero cuando llegaba a la muleta… He querido sacar lo mejor del toro y cuando he visto que ha sido imposible me he doblado con él y le he entrado a matar”.

Antes, Morenito comentaba tras lidiar al toro que abrió plaza: “Es una pena porque el primero tenía buen aire y se partió una pata, este la mano la tenía dañada… Cuando uno quiere tanto y lo da todo, tenían que ayudar un poquito más las cosas. El secreto ha sido que no se cayera, pero para eso tenía que ir muy pegado a la muleta y que no la tocara”. Más tarde, una vez concluyó ante el cuarto, señaló: “El toreo es así. Lo importante es que los profesionales y la gente lo hayan visto, que yo creo que sí, y eso te alivia un poquito. Pero es una pena porque uno quiere conseguir ese sitio y plazas de esta categoría son las que lo dan, pero bueno, a esperar y a seguir: yo creo que esta marcha no es mala”.

Por su parte, Joselito Adame afirmaba tras acabar con el segundo: “La faena ha sido importante. El toro estaba indefinido: no sabías si te iba a dar el derrote, si se te venía, si lo hacía por dentro… era complejo. Por el pitón derecho lo pude ahormar, pero por el izquierdo me costó más porque se venía más rebrincado y más por dentro”. Luego, comentó del quinto: “Le faltó entrega. Embestía siempre reponiendo, nunca metido en la muleta realmente, era incómodo de estar delante”.

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