Fotos: ARJONA
Abrió plaza en Albacete un excelente novillo de El Cortijillo, de preciosas hechuras, gordo y con remate. Repitió incansable con buen fondo de casta en los engaños, aprovechando esa condición Filiberto ligando los muletazos y llegando con fuerza a los tendidos. Sobresalientes resultaron algunos naturales, con el novillo embistiendo por ese lado con ese tranco de más tan famoso en el encaste núñez. Bravo utrero, que exigió siempre al torero mando y que le hiciera las cosas bien. Importante novillo y labor a tener en cuenta a cargo del novillero, que había brindado a Dámaso González y perdió premio tras pinchar en varias ocasiones.
Largo y hondo el castaño girón que hizo cuarto, que repitió con celo en la muleta de Filiberto. Embistió mejor cuando se le llevó por bajo, cuajando Filiberto los mejores pasajes con la muleta en la zurda. Corrió por ahí bien la mano, vaciando perfectamente la embestida y dejando la muleta puesta para ligar el siguiente. Sin embargo, cuando volvía a tocar el triunfo con las manos, malogró todo con el acero haciéndole guardia la espada.
Pedro Jesús Merín se lució en un ajustado quite al segundo, por alto de primeras y por cordobinas a continuación. Arrancó con la muleta rodilla en tierra. Repitió incansable el novillo por los dos pitones y aguantó el novillero ligando los muletazos en un corto espacio de terreno. Encastado animal de Lozano Hermanos, pidiendo papeles al novillero, que derrochó entrega y decisión durante toda la lidia a pesar de su corto bagaje. Tuvo emoción el animal y también la faena, epilogada con una fuerte voltereta de la que volvió maltrecho a la cara del astado, que amagó con rajarse en las postrimerías. Merín mató de un metisaca, una estocada y hubo de emplear el descabello, por lo que sonaron dos avisos.
El quinto, un novillo con presencia de toro, sacó más complicaciones que sus hermanos. Fue más bruto y sacó más genio que los precedentes. Merín, que brindó al público, quitó por gaoneras y después, muleta en mano, se evidenció su falta de oficio. Anduvo con ganas pero sin lograr el lucimiento. Cazó al de El Cortijillo de una estocada.
El manejable tercero tuvo mejor inicio que final de muletazo. Hubo calma y templanza en la ejecución de las suertes de Diego Carretero, que se entregó en una labor interesante ante una res noble aunque intermitente en su comportamiento. El novillero de Hellín, a gusto en todo momento, cerró con toreros ayudados -por alto y por bajo- y mató de estocada entera y un golpe de descabello.
El sexto se hizo el amo en el segundo tercio. No amilanó eso al torero, que salió templado de ánimo y seguro a intentar meterlo en el canasto de su muleta. Valiente, se impuso a la deslucida y complicada condición de su oponente. Tampoco se arredró tras la espectacular voltereta cobrada cuando toreaba al natural. Mermado de facultades, salió del trance con una aparente lesión de rodilla pero se quedó en el ruedo para dar una serie de molinetes ligados y matar de varios pinchazos y descabellos. Se aplaudió su entrega.
Albacete, 14 de septiembre de 2015. Novillos de El Cortijillo -1º, 3º y 5º- y Lozano Hermanos -2º, 4º y 6º-. Bien presentados y de buen juego los cuatro primeros. Excelente el 1º, encastado el 2º, manejable el 3º y bueno el 4º. Más complicados, ásperos, bruscos y con genio 5º y 6º. Filiberto, ovación tras aviso y ovación; Pedro Jesús Merín, ovación tras dos avisos y silencio; y Diego Carretero, oreja y palmas. Entrada: Más de media plaza. Saludó Francisco Javier Ramos tras parear al quinto.
