El Cristo de la hermandad de Jesús de Nazareno de la localidad manchega de Alcázar de San Juan luce una túnica de lo más torera. No en vano, ha sido confeccionada con el vestido de torear que donó a la citada hermandad el diestro Aníbal Ruiz cuando se despidió de los ruedos.
Aníbal Ruiz se retiró en septiembre de 2014 cortando diez orejas en su actuación en solitario en la plaza de su tierra, Alcázar de San Juan, tras dieciséis años como matador de toros. Ahora, contempla “feliz y orgulloso” la preciosa túnica que viste el Cristo del que es devoto.