Ginés Marín, que entró en sustitución de Cayetano, brilla en su presentación en Vitoria y da una vuelta al ruedo en el sexto.
GALERÍA FOTOGRÁFICA DE EDUARDO DEL CAMPO
Fotos: EDUARDO DEL CAMPO
Mucha cadencia aplicó Miguel Ángel Perera al primer valdefresno, que tuvo nobleza y prestaciones. La faena del extremeño tuvo la virtud del temple y un notable toreo con la mano izquierda, logrando muletazos largos y de mano baja. Mató de una estocada y paseó la primera oreja de la tarde. Faena de mucha quietud y autoridad la del extremeño al cuarto, un toro noble pero bajo de raza al que le pisó sus terrenos con suma firmeza. Labor dominadora en la corta distancia, pasándose los pitones por los muslos. Una estocada trasera y tendida. Sonaron dos avisos al tardar en caer el animal que no fueron impedimento para que paseara una oreja.
Manso el que hizo segundo, careció de celo. Joselito Adame logró meter en la muleta tras una faena capaz y técnica. Labor de mucha resolución en tablas, exprimiendo al animal y estoqueando de un espadazo. Se pidió la oreja que el palco no concedió quedando todo en una ovación. Una oreja paseó del quinto tras poner todo de su parte frente a un toro con genio que se movió sin entrega alguna. Apretó el mexicano con el toro aplomado para extraerle muletazos dentro de un conjunto solvente y rematado de una estocada.
Ginés Marín, que entró sustituyendo a Cayetano, entendió bien la embestida cambiante del burraco tercero. El jerezano compuso una faena en la que metió en la muleta al animal a base de tirar de él, ganándole siempre un paso y sin quitarle el engaño de la cara. Saludó una ovación tras un aviso después de una estocada y dos golpes de descabello. Perdió Ginés Marín la oreja del sexto por fallar a espadas. Manejable ejemplar y faena muy cosida del jerezano que tuvo dos series intensas por el lado derecho. Severa actitud de Marín que comenzó toreando de rodillas y concluyó con apretadas manoletinas.
Vitoria, domingo 7 de agosto de 2016. Toros de Valdefresno y Fraile Mazas (3º y 4º). Bien presentados, desiguales de hechuras, nobles aunque mansos y bajos de raza. Miguel Ángel Perera, oreja y oreja tras dos avisos; Joselito Adame, ovación con saludos tras aviso y oreja; Ginés Marín, ovación con saludos tras aviso y vuelta al ruedo tras aviso. Entrada: Un tercio de plaza. Saludaron Javier Ambel y Guillermo Barbero en el primero de la tarde.
