Morante de la Puebla, tras ser abroncado después de estoquear al cuarto: “En estos momentos lo mejor es no decir ni pío”.
Diego Urdiales era un hombre feliz tras cortar las dos orejas de Atrevido, un gran toro de Alcurrucén premiado con la vuelta al ruedo. En declaraciones a nuestros compañeros de Toros TV, el torero riojano señaló: “En la previa decía que tenían que embestir los toros para hacer algo bueno y así ha sido. Este es un encaste que sale bastante frío y había que darle confianza, dejarle incluso que enganchara la muleta para que cogiera el celo necesario y el toro ha respondido. Estoy muy feliz”.
Frente al quinto no tuvo tanta suerte, un toro que en palabras del riojano “No ha tenido nunca entrega, venía siempre por dentro y sin humillar. Pensaba que a media altura iba a tener cierto aire pero no ha querido“. Preguntado de nuevo por la faena a su primero, comentó: “Sabía que podía pasar algo grande aunque distinto a lo del año pasado porque cada toro y cada tarde y hasta uno mismo se siente diferente. ¿Contento? Imagínate, otra vez cortarle dos orejas a un toro aquí…estoy muy feliz“.
Por su parte, Morante de la Puebla fue silenciado tras estoquear al primero de su lote. “Ha sido un toro que más que parado, no sabías por dónde iba a venir. Era distraído y eso transmite desconfianza. Lo he matado como buenamente he podido y ya está. Cuando no lo ves venir de frente te da desconfianza y miedo porque no sabes dónde va a acudir. Lo mejor que ha podido pasarle al toro es que se ha parado porque de lo contrario hubiese sido más molesto para matarlo”. Abrevió frente al cuarto y tras la bronca del respetable, el sevillano declaró: “En estos momentos lo mejor es no decir ni pío”.
Gines Marín afirmó de su primero: “Ha sido un toro complicado, he intentado estar con disposición y cruzar la línea pero la pena es que el toro no fue agradecido. Se frenaba y sabía lo que se dejaba atrás. No pasaba ni empujaba nada”. Luego, tras matar al último, manifestó: “Me voy satisfecho con mi actuación a pesar del poco lucimiento de mis dos toros. La pena ha sido no haberle pegado un espadazo bueno a este sexto, porque creo que he tenido una actuación bastante importante. No es lo que deseaba, pero he demostrado lo que uno quiere ser. Era mi octava corrida y no era fácil estar a la altura”.
