Hay dos ganaderías talismán para la torería andante que no huye del toro bravo. Alcurrucén y Fuente Ymbro. Son muchos los toreros que rompieron en figura y se ganaron el acceso a las grandes ferias con una faena a un toro de estos hierros. Ahora, un “Cornetilla” de la saga de “los músicos” de Alcurrucén, pura procedencia Núñez, ha puesto en el punto de mira de las empresas de las plazas de primera a Curro Díaz. Ya sé que Curro no estuvo con el “músico” de la casa Lozano al cien por cien de sus posibilidades, porque tampoco lo está de sus facultades físcas y emocionales. Y ello por causas fáciles de entender. Pero como el suceso ha tenido lugar nada menos que en la Aste Nagusia bilbaína sobre la que ha focalizado su interés toda la afición de España durante la segunda parte del mes de agosto, uno espera que el de Linares obtenga buenos réditos en lo que queda de temporada, pese a que están hechos casi todos los carteles. Pero, en fin, si no es este año será el que viene.
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