Victorino Martín y Antonio Ferrera han adquirido, a partes iguales, todas las vacas que la ganadera Caridad Cobaleda había heredado de su tío Francisco Galache, de encaste Vega-Villar. Ganadero y torero se han quedado, por sorteo, con 50 vacas cada uno, además de varios raceadores. “Dos sementales han sido para mí y tres para Ferrera, pero tenemos el compromiso de intercambiarlos entre nosotros”, según ha confirmado Victorino a APLAUSOS.
El objetivo de Victorino es refrescar y recuperar familias en su ganadería de Monteviejo, pura procedencia Vega-Villar. “Con esta compra ya casi cierro el círculo que necesitaba de esta ganadería. Este año, además, me han embestido muy bien los novillos, así que vamos a empezar a dar un salto más. Entre unas cosas y otras me he juntado con casi 200 vacas de Vega-Villar, y lo que he hecho ha sido quitar 50 vacas mías y dejar este lote que he adquirido, para no pasar de este número”, explica Victorino Martín. Con esta compra, el ganadero pretende por otra parte recuperar los berrendos en colorado -solo tenía una vaca con este pelo-, puesto que en el lote adquirido van varias vacas y un semental con este pelaje.
Cabe recordar que este lote de Vega-Villar es el 25% que Caridad Cobaleda heredó en 2004 de don Francisco Galache de Hernandinos. Y es que cuando fallece don Francisco Galache, nombra cuatro herederos, que son los hijos de sus dos hermanos: los hijos de Eusebia, que son José María Cobaleda Galache y Caridad Cobaleda Galache; y los hijos de Salustiano, Manolo y Paco Galache. Deja una cuarta parte de su ganadería a cada uno.
