Fotos: EMILIANO VICENTE
El primero de la tarde de la ganadería de Murube, desarrolló nobleza aunque anduvo escaso de raza. Paco Ureña realizó una faena entonada y de buenas formas ante un animal que acabó muy venido a menos. Muy deslucido resultó el tercero de la tarde. El de Victorino Martín no tuvo recorrido en su emebestida desde que saltase al ruedo, siendo fuertemente castigado en varas. Con la muleta no dio opción a un Ureña que lo intentó ante un animal que no se escupió de los vuelos, que careció de emoción y que se vino a menos. Paco Ureña no pudo remontar la tarde con el quinto perteneciente a la ganadería de Buenavista. El astado, con cierta movilidad, careció de clase y finales y resultó muy informal en sus embestidas. Buena disposición del lorquino en un trasteo con muchos altibajos, con un par de desarmes que no llegó a tomar vuelo.
El segundo de la corrida con el hierro de Buenavista manseó aunque tuvo cierto carácter en su embestida. Desde el principio de la faena el animal quiso rajarse buscando el abrigo de la tablas. Emilio de Justo aprovechó la querencia del animal para instrumentar una faena que pudo ser de oreja de no fallar con los aceros. El cuarto de la tarde, de la ganadería de Victorino Martín, desarrolló gran clase en su embestida aunque anduvo muy escaso de fuerzas. Brilló Emilio de Justo en un trasteo de excelsas formas en el que afianzó al de Victorino dejando muletazos de gran profundidad antes de volver a desafinar con los aceros. Cerró plaza un sobrero de la ganadería de Murube que sustituía al titular del mismo hierro que desarrolló cierta nobleza. Emilio de Justo realizó un trasteo variado y de buen tono culminado en esta ocasión de una estocada.
Don Benito, sábado 5 de mayo de 2018. Toros de Victorino Martín (3º y 4º), Buenavista (2º y 5º) y Murube (1º y 6º bis), desiguales de juego. Paco Ureña, ovación, silencio y palmas; y Emilio de Justo, ovación, palmas y oreja con petición de la segunda. Entrada: Menos de media.
