(Foto: André Viard)“Ha sido emocionante. Un día especial como torero y como persona. Desde el momento en que he hecho el paseíllo el público se ha puesto en pie tributándome una calurosa ovación y me ha despedido entre gritos de ¡torero, torero!. Ha sido todo muy emotivo”. Así de feliz se muestra Fernando Robleño momentos después de lidiar seis toros de José Escolar en Ceret. Toda una gesta que el diestro ha resuelto de una manera eficaz y triunfal, sintiéndose satisfecho porque “lo que me preocupaba era dar la dimensión de torero que soy y creo que la he dado. Cada toro tenía una lidia distinta que he sabido aplicar”.
Robleño relata cuáles han sido los momentos clave de la tarde: “Dos tandas con la mano izquierda al primer toro; los lances de recibo al tercero, del que me quedo con seis naturales abandonándome en una faena de mucho calibre; en el cuarto ha habido momentos de torear despacio y relajado, como siento el toreo; El sexto, que tenía un trapío espectacular, le he cuajado una faena repleta de emoción, con la gente puesta en pie”.
Después del gran triunfo de esta tarde, Robleño espera dar un empujón a su carrera. “Si no vale esto, no sé lo que hay qué hacer más. Debe valer para algo esta tarde. De momento, tengo tres ferias a la vista como Orthez, Dax y Mont de Marsan, y nada más. Espero que salgan más ferias”, concluye.
