Manuel Jesús "El Cid" mostraba su desolación a los micrófonos de Canal Plus Toros tras pinchar el triunfo ante el cuarto de la tarde: "Se me ha ido la espada en un extraño del toro. Le he tenido cortadas las orejas, lo he toreado muy sentido, como yo quería torear en esta plaza y la gente de Madrid lo ha sabido ver. Pido perdón por la espada, no se puede pinchar un toro así, que ha sido bueno, bravo. No estoy satisfecho porque aquí lo que importan son los goles y duele pinchar un toro que has cuajado en Madrid con lo difícil que es".
Por su parte Miguel Ángel Perera, se lamentaba también de las pocas opciones que habían tenido sus toros: "El primero ha sido demasiado manso al final, hemos visto otros toros de esta ganadería en los primeros tercios mansear y venirse arriba, pero le ha faltado un punto. Y el caso es que cogía bien los vuelos… Creo que he estado a gusto, mostrando la línea que llevo esta temporada. El otro es que ha sido muy malo imposible. Para echar atrás un toro siempre hay tiempo y creo que el presidente ha pagado con el titular, que no tenía mal aire, las protestas del los otros. Me sabe mal no quitarme la espina de mayo pero en Zaragoza, si Dios quiere, llegará en la última de mi temporada".
Más escueto en palabras se mostraba Castella, que pechó con un lote infame: "Ahí lo habéis visto, no tenía nada. Creo que he hecho lo que había que hacer, el toro no valía para Madrid pero hay que exponer lo que se merece esta plaza y el toreo en general".
