Tras la suspensión del día anterior en la misma localidad, Pablo por fin se pudo presentar en tarde desapacible, pero sin agua que era lo importante. Hermoso de Mendoza trajo lo mejor de su cuadra y se mostró poderoso ante sus dos enemigos.
El primero fue un toro noble, con movilidad y que permitió el lucimiento de todos sus caballos, especialmente de Ícaro. Cortó dos orejas. El otro astado que tocó a Pablo en suerte tenía algún defecto de vista y más escaso de fuerzas que su hermano. El mal uso del rejón de muerte le dejó sin premio.
11 de febrero. Plaza de toros portátil Cuahutemoc en San Pedro Cholula (Puebla). Novillos (1º y 6º) y toros (º3 y 4º) de José María Arturo Huerta y toros (2º y 4º) de Los Encinos. Antonio Lomelín: Palmas y dos orejas; Pablo Hermoso de Mendoza: Dos orejas y palmas; Rafael Ortega: Silencio y dos orejas. Entrada: Tres cuartos.