La ganadería de Castilblanco ha protagonizado un encierro limpio sólo complicado a la entrada de la plaza con un tapón que ha provocado un balance de 31 heridos. Uno de los toros se ensañó contra varios aficionados. Ningún herido presenta heridas por asta de toro, ya que ha ayudado que los toros estén reglamentariamente despuntados para la corrida de rejones.
Los toros, que se lidiarán en la corrida de rejones de esta tarde, emplearon 1'28 en hacer el recorrido del encierro y 3'27 en ser enchiquerados.

