La plaza de toros de Burgos ha pasado las pruebas de carga a las que ha sido sometida para analizar el estado de su estructura que, según los últimos estudios, hace peligrar la celebración de la próxima feria burgalesa en El Plantío.
Los técnicos de la Universidad de Burgos han hecho esta semana las comprobaciones en una de las partes más afectadas del coso y el hormigón ha soportado satisfactoriamente la prueba de esfuerzo. Buenas noticias ya que en un principio se sospechaba que su estado era peor.
La próxima semana los expertos entregarán al consistorio burgalés las conclusiones del estudio para decidir las actuaciones urgentes y si finalmente se puede realizar la feria el próximo mes de junio en la plaza de toros.
Según informa El Correo de Burgos, todo indica que existe la necesidad urgente de actuar con contundencia en las gateras del coso (la parte baja del graderío) y en la zona donde se ubica la enfermería. Y además exigirá realizar arreglos en todos los tendidos porque todos ellos, debido a una falta mantenimiento notable, necesitan también de arreglos.
