"He disfrutado mucho, hacía tiempo que no sentía cosas tan bonitas en Madrid". Son palabras de David Mora tras despachar al primer toro de su lote de hoy en Las Ventas, donde ha dado una vuelta al ruedo. "He estado muy bien con el capote, el toro tenía calidad pero se ha rajado. Podía haber sido de triunfo si hubiera aguantado. Con la espada llevo un racha complicada y a este lo he matado bien. Ha sido de las tardes que uno disfruta en Madrid a pesar de la dificultad y la exigencia de esta plaza pero estoy encantado con esta responsabilidad". Del último, comentaba: "Por el derecho reponía a la hombrera contraria y ha tenido mucho sentido. Creo que llevo una cornada interna en el gemelo, ahora pasaré a la enfermería a ver". Afortunadamente, tras ser explorado por el Doctor García Padrós, se descartó la lesión. "Todo ha quedado en un varetazo", afirmó el torero.
Eduardo Gallo, volteado por el toro que abrió plaza -"me duele el cuello un poco pero estoy bien"- apuntó respecto a su primera actuación: "Estuve a gusto en las primeras series pero luego no me he acoplado con el toro. El viento me molestó pero el toro ha sido bueno. Cogí la espada porque no estaba a gusto". Tras acabar con el quinto, explicaba: "Molesta mucho el viento, en este desde luego me ha molestado una barbaridad. El toro tenía buena condición pero el viento era constante, de mitad de muletazo en adelante me frenaba la muleta. El de hoy no es el resultado que uno busca y por el que uno entrena cada día".
Uceda Leal, por su parte, detallaba tras matar al primero: "Ha sido imposible, ha desarrollado sentido, lo he visto a la caza y violento. No ha permitido nada. Para estar perdiendo el tiempo lo mejor era matarlo cuanto antes". Al finiquitar al cuarto, señaló: "No me he tirado confiado porque por el lado derecho se cruzaba. Con el descabello el toro tenía un callo que hacía imposible matarlo. Le he dado por todos lados y qué más quisiera yo que haberlo matado pronto. Mi lote ha sido muy complicado, venían cruzados, reponiendo con velocidad, han sido difíciles la verdad. Me voy con el sabor agrio de no haberlos matado bien, pero han sido muy complicados".
