GALERÍA FOTOGRÁFICA DE LA JORNADA DE CAMPO
Dos vizcaínos. De Orduña para más señas. Iván Fandiño e Iván Abasolo, dos amigos que el próximo domingo coincidirán en el ruedo de la plaza de toros de Robledo de Chavela para que el primero convierta en matador de toros al segundo. Una fecha muy especial para ambos. ¿Qué significa alternativar a un paisano? "Una suerte, un honor y un privilegio. Si hace diez años alguien hubiera dicho que Orduña iba a tener dos matadores de toros, quizá no le hubiera creído", afirma Fandiño. Para Abasolo recibir la alternativa de manos de Fandiño supone "a la vez mucha responsabilidad, ilusión, admiración y respeto por ser paisano y estar en el momento que se encuentra". "Conozco a Iván desde que empezó -recuerda Fandiño-, le he visto crecer como torero y como persona, somos buenos amigos y tenía la obligación de ayudarle y darle una alternativa que se merece por su sacrificio y su esfuerzo". ¿No hubieran preferido ambos que el festejo tuviera lugar en una plaza del País Vasco?. "Si, lo barajamos, pero no ha sido posible. Y desde luego, tenía claro que no podía dejar pasar este año sin darle la alternativa a Iván", asegura Fandiño. "Por supuesto, lo hemos intentado por todos los medios y no hemos recibido ni la contestación del no. Espero y deseo que en un futuro me tengan en cuenta más que nada por respeto", apunta Abasolo. Sobre el parlamento de la ceremonia Fandiño adelanta: "Improvisré e intentaré salirme del discurso habitual". Por su parte, Abasolo en la devolución de trastos expresará: "Le diré que ojalá que puede llegar algún día a igualarle y compartir muchas tardes juntos". Como testigo estará presente el mexicano Joselito Adame, un toro que para Abasolo supone "otro aliciente más por el momento que atraviesa y que se suma a una tarde ya de por sí especial". ¿Preferiría ser el único en portar la bandera del toreo vasco?, cuestionamos a Fandiño. "No, al contrario. Ojalá hubiera más. El País Vasco tiene muchas raíces y ha sido cuna de grandes toreros".

