La Revolera

Las razones de Manzanares

Paco Mora
viernes 28 de febrero de 2014

José Mari Manzanares ha salido a la palestra para poner en claro las razones del plante de cinco figuras del toreo a Sevilla. Plante que no ha sido tal ni a la capital del Betis ni a La Maestranza sino a la empresa Pagés...

José Mari Manzanares ha salido a la palestra para poner en claro las razones del plante de cinco figuras del toreo a Sevilla. Plante que no ha sido tal ni a la capital del Betis ni a La Maestranza sino a la empresa Pagés, léase Canorea-Valencia. Solo con que la mitad de lo que han dicho por escrito y de palabra los citados toreros sea cierto -y no vemos por qué habían de exagerar- hay motivos suficientes para hacerle un corte de manga a tanta falta de respeto y satrapía del tándem empresarial en cuestión.

Pero una puntualización se hace necesaria según mi criterio: lo podrían haber hecho uno a uno y sin darle carácter societario a su justa reacción. Con ello se habrían ahorrado ser bautizados como G5, que viene a ser la mitad del G10 que acabó como el rosario de la aurora. Y no solo por no saber comunicar sus intenciones sino porque en las cosas del arte ca uno es ca uno y tiene sus caunás. Ahora bien, José Mari es un grande del toreo y como persona un fuera de serie, y se ha solidarizado con sus cuatro compañeros siendo él quien mejor trato ha recibido de los cuñados. Eso se llama grandeza de espíritu y nobleza de carácter. Y compañerismo.

Cada uno obra según su conciencia y ante eso no hay nada que objetar. La única pregunta que cabe hacerse es si Manzanares, "el gran esperado" siempre en Sevilla, no habrá actuado como Jaimito en el célebre chiste: “Mi hermana me ha pegado, para que se joda no como”. Porque quienes se van a quedar sin verlo van a ser lo aficionados sevillanos, que lo quieren y admiran hasta la pared de enfrente y no tienen por qué pagar los platos rotos de un Canorea que al fin y al cabo lo único que le interesa de La Maestranza es la taquilla. No obstante, muy bien el paso al frente de José Mari en pro de una mejor comunicación con la afición, pero uno se siente muy bien comunicado con las razones del monstruo de Alacant en sus cuatro últimas tardes de Albacete, las de unas cuantas más en la rivera del Betis, algunas también en Valencia y sobre todo con aquel monumento inolvidable al arte del toreo que fue su actuación en Nimes en el cierre de su temporada 2013. Eso es comunicarse con los aficionados. Obras son amores y no buenas razones.

Síguenos

ÚLTIMAS NOTICIAS

Cargando
Cargando
Cargando
Cargando
Cargando
Cargando
Cargando
Cargando