El último martes que comentamos en esta página fue el martes de dolores en el que Mora, Nazaré y Fortes acabaron en la enfermería y, salvo que los grandes estadistas del toreo como Cuberta, Maxi Pérez, Suárez Guanes, etc. digan lo contrario, que parece que no, nunca una tarde de toros en Las Ventas de Madrid acabó tan aceleradamente. De ese martes apocalíptico, volvió Juan del Álamo que lleva abonado a una oreja por tarde desde hace tiempo. No es mal abono y tendrá que llegar la tarde de la puerta grande. Pero este salmantino pide paso en la cerrazón de los carteles de ferias.
