Este viernes, en el quinto encierro de las fiestas de San Fermín, le tocaba el turno a los toros de Jandilla. La carrera volvió a romper el velocímetro, los astados volaron por las calles de Pamplona, completando el recorrido en dos minutos y diecinueve segundos, misma marca que los victorianos el jueves. La manada salió compacta de los corrales de Santo Domingo y uno de los toros castaños tomó la cabeza de la manada a lo largo de la cuesta.
Tras pasar la curva de Mercaderes, la manada se estiró justo al tomar Estafeta, tomando la delantera los seis astados. En ese tramo se pudieron ver buenas carreras y los jandillas dejaron una bonita imagen al dejar atrás a los cabestros.
El primer parte médico ofrecido por Cruz Roja tras el encierro deja cinco traslados a centros hospitalarios, todos ellos por contusiones y sin heridos por asta de toro. La primera fue una contusión torácica con herida en el cuello que tuvo lugar en el Ayuntamiento, precisamente producida por ese toro castaño que tomó la delantera en la manada. Del resto de contusionados, dos de ellos fueron en Mercaderes y otros dos en Espoz y Mina.
Esta tarde, frente a los toros de Jandilla harán el paseíllo en el coso pamplonica los diestros Juan Ortega, Roca Rey y Pablo Aguado.
