En la jornada del pasado sábado, 21 de agosto, comenzaron los festejos de la calle San Joaquín en la población castellonense de Vilavella con un astado de Victorino Martín.
Un toro que realizó una rápida salida aunque muy pronto mostró un comportamiento frío pero no excepto de peligro. Los recortadores también observaron este comportamiento, y dejaron al astado que campara a sus anchas, ya que les costaba en exceso arrancarle una embestida y cuando lo hacía era sobre una presa segura marcando en demasía su encaste.