La espina

Renovarse o morir

Paco Mora
domingo 15 de febrero de 2015

Está bien que se defienda la Tauromaquia frente a sus enemigos jurados y también que se divulgue de cara a quienes desconocen su historia e ignoran su importancia cultural, artística y racial. Pero es más urgente que el toreo se rearme desde su propia entraña, propiciando su integridad y garantizando la renovación en sus filas. De la perentoriedad de ambas cuestiones ha sido buena prueba la miniferia de Valdemorillo, en la que, pese a que el ganado lidiado en esta edición ha bajado ostensiblemente de nivel en cuanto a presentación, bravura y trapío, se ha detectado con claridad cómo el público vibra ante las novedades, tanto de novilleros como de matadores, cuando éstos se entregan tiñendo de interés y alegría los tendidos. Los novilleros Escudero y Jiménez han sido dos aldabonazos de ilusión y promesa de futuro en la población serrana madrileña. Así como Víctor Barrio y Escribano han irrumpido en ese “ensayo general con todo” que, con sus más y sus menos, supone un desperezarse de la afición cuando comienza el mes más corto del año.

Lea AQUÍ el artículo completo en su Revista APLAUSOS Nº 1951

Síguenos

ÚLTIMAS NOTICIAS

Cargando
Cargando
Cargando
Cargando
Cargando
Cargando
Cargando
Cargando