Perera: "Este año, por unas cosas u otras, no estaba para mí. Pero la temporada es muy larga...".
A la muerte de su primer toro, Julián López "El Juli" valoraba de la siguiente manera en los micrófonos de nuestros compañeros de Canal Plus Toros su actuación: "Ha sido un toro enrazado, me ha gustado. No se ha ralentizado para reducir más su embestida. Esta plaza no es fácil pero esto acaba de empezar". Sobre el segundo de su lote, el madrileño comentó: "No es fácil, me he centrado en él, en sacarle la embestida. Esto es así de duro. Hay que ir construyendo, yo voy a ir a mi lucha". Una vez mató al quinto, resumió de la tarde: "He estado sincero, entregado, y he intentado torear puro y de verdad toda la tarde. Es casi un milagro que embista un toro con 660 kilos, pero bueno, es lo que hay. Si por mí fuera los mataría con 520 kilos y las caras bien hechas. Los toreros debemos matar lo que salga por chiqueros".
Miguel Ángel Perera no tuvo opciones con el segundo de la tarde. En palabras del torero extremeño, fue "un toro muy deslucido y con una embestida que no vale ni para Madrid ni para ninguna plaza. Iba a su altura, es cierto que tenía ritmo pero no quería coger los engaños ni emplearse". Luego, tras matar al cuarto, dijo: "Duró poco, después de la segunda tanda se vino abajo y resultó rajado también. Con los quites parecía que se calentaba la tarde pero... Le vi cosas importantes al toro, por eso le brindé, pero ha durado poquito". Después de despachar al sobrero que cerró plaza, comentó: "Quedaba la esperanza de que al cambiar de ganadería se pudiera enderezar la tarde, pero este se ha movido humillando poco y con una embestida insulsa. He tratado de ponerle, pero era complicado. Este año, por unas cosas u otras, no estaba para mí, estaba para otros. La temporada es muy larga y ahora hay que seguir buscando ese triunfo diario".
