El arte flamenco ya es Patrimonio Cultural de la Humanidad. Lo ha sido siempre, pero ya lo ha reconocido “urbi et orbi” el sultanato europeo de la cultura. Con el aditivo ineludible de “inmaterial”. Es lógico, por eso no tienen la consideración de PCH la tortilla de patatas, la aspirina y el bicarbonato. Ni la tendrán jamás, aunque una casa sin esas tres piedras angulares de la civilización debe ser lo más parecido a una caverna de la Edad de Piedra. ¡Qué mal lo debieron pasar los cavernícolas sin aspirinas, tortilla de patatas ni bicarbonato! ¡Y sin corridas de toros!...
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