La confirmación de alternativa en Las Ventas el 15 de agosto marcó un antes y un después. Más allá de la oreja que cortó, Javier Jiménez puso de manifiesto su crecimiento como torero. A la raza, el valor y la capacidad que siempre ha tenido, el sevillano le ha añadido más expresión y gusto a su toreo. Un paso adelante, un golpe de atención en una temporada de menos a más. - “Sobre la base del valor le he puesto gusto y sentimiento a mi toreo porque al fin y al cabo uno tiene que sentir lo que hace”
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