Adolfo Martín ya ha recibido el alta y ha abandonado el hospital Infanta Cristina de Badajoz. El ganadero ya se recupera en su domicilio particular y, aunque todavía se encuentra muy débil debido a la gravedad de las cornadas que sufrió en el campo, asegura a APLAUSOS que "en casa estoy más tranquilo, mejor que en el hospital".
La evolución de las heridas es muy buena, asegura, aunque "la recuperación va muy lenta y es normal. Un catedrático de Madrid estuvo viendo el informe y se quedó asombrado de que estuviese vivo porque de cada cien, sólo uno sigue adelante. Date cuenta que la cornada de la espalda me rozó el pulmón, el hígado y los intestinos", afirma Adolfo.
La rehabilitación del ganadero consiste en "andar y andar, eso es lo que hago cada día", asegura quien todavía no ha vuelto a su ganadería, "es lo que más echo de menos".
Adolfo tiene que volver al hospital Infanta Cristina de Badajoz el próximo 22 de noviembre para una nueva revisión general.

