De las grandes catástrofes de la Historia suelen surgir también las soluciones de la ciencia para enfermedades que parecían imposibles de abordar con éxito. Así ocurrió con la penicilina, que acabó con la tuberculosis que diezmaba a la población mundial, y otras muchas enfermedades infecciosas que gracias a los antibióticos ya no son mortales de...