Alejandro Talavante: “Me voy con las ganas de cuajar un toro aquí”

Los protagonistas del festejo manifestaban a los micrófonos de los compañeros de Canal Plus Toros sus sensaciones de la corrida. El Fandi lamentaba las pocas opciones que le había brindado su lote: “El primero cuando cogía aire embestía pero no ha empujado para adelante, le ha costado mucho desplazarse. Una pena porque con un más de fondo hubiera sido un buen toro tal y como había mostrado en los primeros tercios. Si lo tocabas se caía, si no lo hacías no pasaba… y así es muy difícil. Y el cuarto se ha venido muy a menos, nunca ha tenido ritmo. Por el derecho soltaba la cara y por el izquierdo no tenía continuidad y así es muy complicado. He puesto el cuarto par porque no me había quedado a gusto con el tercero y resulta que casi me he quedado peor”.

Miguel Ángel Perera cuajó la faena de más entidad del festejo ante el tercero, malograda con los aceros, por lo que no ocultaba su malestar: “Ha sido una pena pincharlo, ya me pasó el año pasado aquí con un toro de Victoriano del Río. He estado a gusto a pesar del viento y de que el toro soltaba mucho la cara. Hay que pulsearlos mucho porque la brisa que sopla molesta de verdad y aún así lo he toreado bien con la izquierda. Para matar estaba un poco cruzado y no lo he visto, en fin, una putada”. Tras matar al deslucido quinto, más de lo mismo: “Siempre tienes la esperanza de que aguanten un poco más. Ha durado una tanda. Imposible. Tratas de apostar yéndote a los medios pero con un toro que diga nada es imposible. Por lo menos este lo he pinchado arriba”.

Por su parte, Alejandro Talavante, que logró cortar la única oreja de la tarde, valoraba así su tarde: “El primero punteaba mucho y no transmitía. He estado seguro, firme para colocarlo y para tratar de sentirme. Era mejor quedarse quieto para apretarle que darle aire y el sexto se ha venido excesivamente abajo. Sin clase, se aburría, ha sido complicado la verdad. No he disfrutado por el lote, es bonito puntuar en una plaza importante como Pamplona, pero me voy con las ganas de cuajar un toro aquí”.

Acceda a la versión completa del contenido