El pasado 30 de diciembre la Fundación Cultura Taurina celebró su II Almuerzo de Navidad, que estuvo dedicado a Álvaro Domecq Romero, rejoneador y ganadero de bravo.
El acto tuvo lugar en Jerez de la Frontera, concretamente en los salones del Restaurante “El Bichero”, y reunió a medio centenar de personas, entre representantes de la administración, rejoneadores, toreros, aficionados y amigos, que han querido testimoniar su agradecimiento a quien, durante su prolífica vida, ha marcado un hito en el arte del rejoneo y ha consolidado y definido un encaste como la ganadería de Torrestrella. El torero Julián López “El Juli” y el garrochista Tomás Morenés también se acercaron para testimoniar su adhesión.
Tras un saludo de bienvenida, copa en mano, se procedió a degustar el menú confeccionado por Fermín Anguita antes de pasar, tras los postres, al capítulo de homenaje. Éste se inició con la proyección de un vídeo que dio repaso, con imágenes, a los diferentes momentos de la trayectoria del homenajeado, el cual se inició profesionalmente en el rejoneo en la plaza de Ronda el año 1959 y se hizo cargo de la ganadería al fallecer en 2005 su padre, Álvaro Domecq Díez.
A continuación Marciano Breña Galán, como portavoz, tomó la palabra para hacer el ofrecimiento del acto y glosar resumidamente los méritos de Álvaro Domecq. Le siguió en el uso de la palabra Felipe Morenés, marqués de Vilarreal de Burriel, que hizo hincapié en la relación de Álvaro con su padre, don Álvaro. El abogado y político Aurelio Romero aprovechó la ocasión para felicitar a la Fundación Cultura Taurina por su trabajo a favor de la Fiesta y, en cuanto al homenajeado, destacó entre sus virtudes la de ser un hombre bueno.
La segunda parte de las intervenciones de homenaje corrieron a cargo del periodista Jerónimo Roldán, que lanzó la idea de que se le conceda a Álvaro Domecq la Medalla de Oro de Andalucía; el torero Juan José Padilla, que recordó sus labores iniciales de tienta de machos en Los Alburejos y también al toro “Fandanguillo”, que le permitió convertirse en torero de Bilbao; el novillero Javi Peregrino, que recitó una poesía dedicada al padre del homenajeado, y la vicepresidenta del Parlamento Andaluz, Ana Mestre, que fue el año pasado protagonista del I Almuerzo de Navidad y que ahora se refirió a lo justo de este reconocimiento a un personaje ejemplar.
Cerró este capítulo Rafael Valenzuela (presidente de la Fundación Cultura Taurina), que manifestó el reconocimiento de su entidad a Álvaro Domecq por su labor y aprovechó para expresar la voluntad de seguir trabajando por la concordia y la libertad de la cultura taurina; le hizo entrega, junto a Ana Mestre, de una placa de recuerdo al homenajeado. El propio Álvaro Domecq culminó el acto con una exposición de sus sentimientos, agradeciendo los reconocimientos que le hacen sentirse afortunado. Al final los asistentes posaron para una foto de familia como testigo de este almuerzo navideño, que tendrá continuidad en próximas ediciones.
