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Arévalo ata a las figuras y se prepara para dar su feria

Ávila podría ser la primera plaza de toros que celebre su feria taurina tras el parón generalizado de la Fiesta por la pandemia. El empresario Martín Perrino está empeñado en dar toros “con la bendición del coronavirus y aunque caigan chuzos de punta”, ha declarado a APLAUSOS. Tiene previsto organizar dos corridas de toros los días 17 y 18 de julio y un concurso de cortes el 19, cumpliendo con todas las medidas sanitarias y de seguridad, y teniendo en cuenta la reducción de aforo. Cabe recordar que la Junta de Castilla y León está trabajando en un documento con medidas para la celebración de espectáculos taurinos.

“Es una declaración de intenciones”, afirma el empresario, quien adelanta que tiene los carteles muy avanzados y que en los próximos días podría presentar las combinaciones. Asegura que contará “con todas las figuras del toreo que quepan”, con quienes ya ha mantenido conversaciones y se han mostrado muy receptivas. “Me han transmitido su confianza, han dicho que no hay problema ninguno y que se adaptan a lo necesario, el aspecto económico no es lo importante, incluso ha habido alguna figura que me ha llamado ofreciéndose para torear”.

No ha querido desvelar nombres, pero sí una ganadería: Garcigrande, que lidiará las dos corridas. “Domingo Hernández siempre fue un señor y ahora lo son sus hijos. Siempre han estado a las duras y a las maduras y les estoy muy agradecido. Garcigrande vendrá en las mismas condiciones de siempre, ahora lo necesitan más que nunca. Me gustaría llevar incluso una novillada para los cortes, pero no sé si será posible”, añade el empresario.

UN EJEMPLO

El Ministro Uribes habló en su comparecencia del pasado viernes sobre la intención de reanudar la actividad taurina y todo apunta a que pronto saldrán nuevas medidas sanitarias. Martín Perrino espera que los festejos se puedan retomar con la mitad del aforo. Eso supondría que podrían entrar en la plaza unas 2.400 personas, pues el aforo del coso es de 4853 localidades. No tendría tampoco el problema de dejar fuera a abonados, pues se cuenta con unos 1300, así que todos ellos tienen cabida. Entre las medidas, está la de comenzar la corrida a las 21:00 horas, “para evitar el calor”. “Y si hay que poner gel hidroalcohólico por todos los tendidos, lo haremos”, puntualiza. Además, hay negociaciones para que la feria se pueda televisar.

El mensaje con el que concluye Martín Perrino es todo un ejemplo. “Las ciudades pequeñas como Arévalo se están jugando que no vuelva a haber toros si no hay este año. Esto no se hace por dinero, a mis cerca de 70 años no me gustaría que esta fiesta cayera. No es valentía, es necesidad, no quiero demostrar nada a nadie. Sería importante abrir más plazas, si yo puedo hacerlo con 2400 localidades, ¿por qué no pueden otras que tienen cabida para siete u ocho mil? Si no son capaces de hacerlo, que dejen paso a otras personas”.