A ellos hay que atribuirles el milagro de la plaza de Sanlúcar de Barrameda, un coso que han recuperado a base de constancia, trabajo y una apuesta sólida por carteles de relumbrón. Sin miramientos, Carmelo García y Antonio Caba admiten que para atraer al aficionado hay que darle lo mejor y para eso no se puede escatimar en toros ni en toreros.
Fórmula arriesgada pero única, aseguran, para lograr un éxito necesario. Tras siete años organizando festejos, las metas son claras: consolidar su gestión y seguir extendiendo su manera de trabajar y sus ideas.
- “La mejor feria de España no tiene mejores carteles que los nuestros. Iguales sí. Eso lo podemos decir y bien alto”
- “De torero no pasé una noche sin dormir, como empresario sí”