El quinto de la tarde en Las Ventas tenía dos velas por delante, enseñando las palas. Un toro muy ofensivo. Damián Castaño se fajó con él en un toma y daca de máxima tensión debido a la falta de humillación del toro y a la tendencia a colarse. El torero salmantino se puso siempre como si fuera bueno, con la montera calada y el pecho por delante, hasta que con la izquierda se lo echó a los lomos.
Rápidamente fue llevado a la enfermería, donde fue intervenido de una "herida por asta de toro en tercio superior de la cara posterior del muslo izquierdo con dos trayectorias: una hacia dentro de 15 cm que bordea cara lateral de fémur y contusiona arteria femoral, y otra hacia arriba de 10 cm contusionando isquión. Es intervenido quirúrgicamente bajo anestesia general en la enfermería de la plaza de toros de Las Ventas y trasladado posteriormente a la clínica La Fraternidad Muprespa-Habana. Pronóstico: grave. Firmado: Dr. Máximo García Padrós y Dr. Máximo García Leirado".