El novillero Cristiano Torres, que cortó dos orejas del buen quinto de El Montecillo, se fue a la enfermería por su propio pie al concluir la tercera novillada del Zapato de Oro de Arnedo. El espada aragonés fue volteado por su primer novillo, sufriendo un golpe en el hombro derecho del que fue atendido detectando los doctores una contusión. El parte médico completo es este: "Durante la lidia de su primer novillo es arrollado, golpeándose en hombro derecho. Dolor a la movilización. Dolor a la presión digital en planos musculares. Contusión en hombro".