A las 9 de mañana y tras un largo viaje desde Tarifa, Curro Díaz llegaba a un hospital de Valladolid para que realizar la cura del aparatoso percance sufrido ayer en la localidad gaditana. Su apoderado, Joxín Iriarte, explica a APLAUSOS el alcance y el estado en el que se encuentra el torero de Linares: “Nos han confirmado lo que ya sabíamos: tiene el tabique nasal partido en dos. Aun así, Curro quería torear y lo va hacer. Lo tenía claro anoche y lo sigue teniendo, por eso hemos viajado para llegar pronto y buscar la mejor solución de cara a que le moleste todo lo menos posible”.
“Le van a poner una célula para inmovilizarle el tabique nasal y con una cola cicatrizante han curado un corte muy profundo que tiene debajo del ojo derecho y que le molesta mucho”, afirma Iriarte, quien admite: “La responsabilidad y las ganas de demostrar cosas en la plaza están por encima de los percances. Curro lo tiene muy claro. Valladolid y el toreo merecen hacer estos esfuerzos”.

