El novillero Daniel Artazos, alumno de la Escuela Taurina de Valencia, ha estado presente en el programa radiofónico Terra de Bous, de À Punt. Artazos ha sido entrevistado por el periodista Germán Estela tras resultar cogido de forma muy grave el pasado mes de agosto en Málaga. El novillero, de origen aragonés, fue prendido de forma muy violenta en La Malagueta durante el pasado certamen de escuela taurinas, realizaba un quite cuando fue sorprendido y volteado dejando una imagen que hizo temer lo peor. Artazos tuvo que ser intervenido quirúrgicamente de una fractura de la vértebra C-5.
"Lo pasé muy mal los primeros días, casi no podía comer. Ya llevo dos meses con el collarín, si todo va bien en un mes me lo quitan", narraba Artazos nada más comenzar la entrevista, continuó comentando como afrontaba esa tarde: "Iba a Málaga con mucha ilusión, es una plaza muy bonita y de primera, estaba a las puertas de mi debut con caballos en Zaragoza, en mi tierra, y no pude torear mi novillo. haciendo el quite al de mi compañero me cogió. Al intentar pegarle el lance -por verónicas- me arrolló. De la voltereta no me acuerdo muy bine, en el suelo recuperé el conocimiento, del cuello para abajo no sentía el cuerpo, intenté levantarme y el cuerpo no respondía. Ya en la enfermería sentí un hormigueo muy fuerte en el cuerpo, pensé que era del golpe y que podría continuar. Los médicos vieron que era algo grave".
"Me pasó una cosa muy curiosa, yo estuve buscando a Fortes antes en el callejón, le quería brindar mi novillo. Y cuando pasó, fue la primera cara que vi al recogerme del suelo. Se quedó un rato conmigo en la enfermería", afirmó Artazos sobre los recuerdos que tiene de ese momento, "una vez llegué al hospital me asusté un poco más, los médicos me pusieron goteros y me hacían pruebas, y me decían que no podía intentar moverme porque me podía quedar tretrapléjico".
Pese a la dureza del percance y la recuperación, Artazos tuvo mucha suerte, algo que comenta en primera persona: "Todos me han dicho que ha sido un milagro, podría estar en una silla de ruedas de por vida". "He recuperado bastante movilidad, perdí la movilidad del lado izquierdo. Lo que más me está costando es la mano. Empecé a caminar días después de la operación, ahora estoy en un proceso de rehabilitación que es muy lento pero voy viendo mejoría. Me han dicho que me voy a recuperar cien por cien".
"Los primeros días no sabía muy bien que iba a pasar. Ahora que voy recuperando la fuerza y me veo mejor estoy recuperando la ganas de torear. Es muy duro ver a tú familia pasarlo mal, a Víctor Manuel Blázquez también, que te tengan que dar de comer...", asegura el novillero en una desgarradora conversación, y se sincera explicando a la gravedad del percance, "la vértebra C-5 la tenía chafada, ese hueso me han tenido que reemplazar y el trozo que quedaba me lo han fijado con una plaza y tornillos. La operación salió muy bine y yo me encuentro bien. No tengo plazos, según yo me vaya encontrando".
"Una de las cosas buenas que me llevo de esto es la gente, me he sentido muy arropado, ha sido una de las cosas buenas dentro de lo malo. Y referente a los toros pensar que esto es algo más, que a los toreros les pasan estas cosas, siempre he creído que esto es lo que Dios quiere para mí. No voy a dejar de intentarlo", apostilló el novillero antes de relatar sus comienzos en la profesión.

