El torero charro estoqueó una corrida de toros de La Trinidad complicada y astifina con tres cuartos de entrada en los tendidos. Cortó una oreja de su lote tras hacer un esfuerzo con un quinto toro manso y peligroso frente al que a base de insistir, consiguió robar muletazos de mérito. Lo mató de estocada y descabello y el público le pidió la oreja con mucha fuerza. Completaban el cartel Juan Pablo Díaz, vuelta y dos orejas y Martín Campuzano, tres avisos y silencio.