La Revolera

El don de la oportunidad

Paco Mora
jueves 10 de noviembre de 2011

Vaya por delante que a mí siempre me parecerá poco el dinero que ganen los toreros en el ejercicio de la profesión más difícil y peligrosa del mundo. Y que la participación que les corresponda en concepto…

Vaya por delante que a mí siempre me parecerá poco el dinero que ganen los toreros en el ejercicio de la profesión más difícil y peligrosa del mundo. Y que la participación que les corresponda en concepto de derechos de imagen, en los beneficios que arroje la transmisión televisiva de las corridas de toros, puede que todavía no esté reglamentada debida y justamente. Que no lo sé de manera rigurosa. Ahora bien, ¿creen los toreros que es este precisamente el momento adecuado para enzarzarse en esa querella?

Me explicaré: ¿No creen que la crisis económica que afecta al país en general, y por tanto también al negocio del toreo, no pinta la ocasión como idónea para la reivindicación de esos derechos que nadie puede negarles en justicia? ¿No deberíamos, por el contrario, unir esfuerzos y voluntades para que los recortes en la celebración de espectáculos taurinos en la temporada de 2012 sean mínimos? Dicen los franceses que cuando no es season (estación) para plantar rábanos, no vale la pena plantarlos porque no van a fructificar. Lo cual no quiere decir que se deba renunciar a cosechar rábanos cuando sea el tiempo adecuado para ello.

Cuando en medio planeta de los toros los mandamases y sus mercenarios se unen en el empeño de camuflar las carencias más perentorias de sus administrados, con el “toros sí o toros no”, e incluso en plazas tan tradicionales como la de Quito han conseguido imponer las corridas a la portuguesa, ¿le puede convenir a la Fiesta que se abra un nuevo frente de discordia, en el que los cabecillas del movimiento por los derechos de imagen corren el riesgo de quedarse más solos que la una, e incluso con el demonio de la división en sus filas? A ver si vamos a darles la razón a quienes nos motejan de gentes difíciles, exigentes y amigas de la bronca. El de la oportunidad es un don nada despreciable…

Síguenos

ÚLTIMAS NOTICIAS

Cargando
Cargando
Cargando
Cargando
Cargando
Cargando
Cargando
Cargando