FERIA DE LA VIRGEN BLANCA

El Juli y Alejandro Talavante, a oreja por coleta en Vitoria

Morante de la Puebla, de vacío con una deslucida y desclasada corrida de El Ventorrillo
Íñigo Crespo
miércoles 05 de agosto de 2015

VÍDEO RESUMEN DEL FESTEJO

GALERÍA FOTOGRÁFICA DEL FESTEJO


Abrió plaza un toro desrazado, deslucido, sin entrega ni fuerza de El Ventorrillo. Llevó siempre la cara entre las manos el toro y ante él, Morante dejó esbozos dentro de una faena breve y mal rematada con la espada. Su segundo fue un toro deslucido, que se quedaba corto. Muy ausente y sin actitud, se inhibió de la lidia. Dos probaturas, una por cada pitón, y un bajonazo dieron paso a una bronca monumental.

El segundo fue devuelto por su falta de fuerzas, corriéndose turno y lidiándose un toro que se movió pero al que tampoco acompañaron las fuerzas. Quiso más que pudo el toro de El Ventorrillo que echó siempre las manos por delante. El Juli, en una faena inteligente, lo templó sin obligarle, llevándolo a su altura y ligándolo con facilidad sobre la mano derecha. Labor de muchos muletazos coronada de una estocada. El quinto, un sobrero de la ganadería titular, resultó manso y descompuesto. El madrileño le dio muchas ventajas, dejándolo sin picar y no obligándolo. La faena, ligada, llegó al público por la facilidad y la solvencia con la que El Juli domeñó la embestida del toro. Una estocada defectuosa le dejó sin el premio de la oreja.

Alejandro Talavante sorteó por delante un toro deslucido, de sosa embestida y con la cara alta. El extremeño trató de empujarlo hacia adelante en una labor desarrollada en los medios y en la que estuvo mucho tiempo delante del toro. Imposible el lucimiento. Al sexto, como a toda la corrida, le faltó clase. Punteó los engaños y echó la cara arriba. Talavante, muy decidido y sin renunciar a nada, cuajó una faena que tuvo la virtud de la seguridad en los toques y el notable pulso. Muy sutil, sin violentar al toro, el extremeño compuso poco a poco una labor en la que firmó muletazos buenos. Mató de una estocada y paseó una oreja.

Vitoria, miércoles 5 de agosto de 2015. Toros de El Ventorrillo, el quinto como sobrero. Correctos pero desigualmente presentados. Variados de pelo. Deslucida en líneas generales, sin clase ni raza. Más manejables segundo y sexto. Morante de la Puebla, silencio y bronca; El Juli, oreja y ovación con saludos tras leve petición; Alejandro Talavante, silencio y oreja. Entrada: Dos tercios. Antes de romperse el paseíllo se guardó un minuto de silencio en memoria de José Luis Ispizua, presidente de la plaza de toros de Vitoria, y José María Sedano, asesor presidencial, fallecidos este invierno.

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