Como ya ocurriera hace un año, Jiménez Fortes ha salido de Valencia con el crédito intacto y dejando muestras de un concepto de mayor expresión. El valor de siempre pero más canalizado, más sólido, con mayor argumento. El malagueño se sincera y explica que ahora es más libre que nunca, que los límites se los marca él mismo en su relación con el toro. Sincero, distinto, reflexivo. Reconoce errores y aciertos. Sabe dónde se encuentra. De dónde viene y hacia dónde va. No oculta que la experiencia ha fraguado un nuevo torero, una nueva versión de sí mismo, la consecuencia del dolor, del triunfo, del fracaso y del éxito.
- “El valor lo tengo, eso es algo que va dentro de uno y que no puedo renunciar a él ni darle la espalda. El valor es de las cosas más importantes que debe tener el toreo y siempre lo utilizo”
- “He evolucionado artísticamente y por eso mi toreo se percibe. He sabido conjugar el estar al límite delante del toro con aportar otros elementos a mis faenas. Es posible que estemos hablando de un nuevo Jiménez Fortes”
- “En Valencia he cuajado la tarde más importante desde que soy matador. O una de las más rotundas. Una tarde así es consecuencia de un trabajo fuerte, de una preparación intensa durante los últimos seis meses”
- “Las líneas se pasan no por temeridad sino por buscar una verdad. Si quieres abrirte camino en el toreo tienes que apostar. Otra cosa es como lo perciba el público o como lo haya contado la prensa”
Lea AQUÍ la entrevista completa en su Revista APLAUSOS Nº 1956
(Foto: Rullot)
