Morante de la Puebla sufrió una espectacular voltereta cuando pasaba al natural al primer toro de Juan Pedro Domecq en Úbeda (Jaén). Un momento de tensión que afortunadamente quedó en el susto. Se levantó enrabietado el sevillano cuajando otra portentosa serie sobre el lado derecho. La estocada fue fulminante, cortando dos orejas pedidas por unanimidad.