El nombre de El Pilar va unido a una de las ganaderías punteras de finales del pasado siglo y de lo que llevamos del actual, al de una divisa que cada temporada logra infinidad de titulares gracias al magnífico juego de sus toros en las ferias más importantes. Disputada y apetecida como plato principal de las grandes figuras del toreo, la pasada temporada volvió a conseguir grandiosos triunfos como el de Sevilla o los de Madrid, Huesca, Algeciras, Valladolid o Las Rozas. Pero tampoco hay que olvidar el resto de plazas, donde cuando se acartela El Pilar va unido a la garantía de que esa tarde se vivirá sobre las arenas el espectáculo del toro bravo.
- “Hay que conocer las exigencias del mercado y del público, pero los toros sobre todo han de ser bravos. Es lo primordial”
- “La última camada estuvo en la línea que perseguimos. Nos hizo ver que nuestro trabajo está bien hecho”
Lea AQUÍ la entrevista completa en su Revista APLAUSOS Nº 1953