Guillermo García Pulido se convertirá en matador de toros el domingo en Valdemorillo de manos de Miguel Ángel Perera en presencia de Paco Ureña y con toros de Alcurrucén. Un estudiante de Derecho y ADE de 22 años que se doctorará en tauromaquia en un cartel de lujo en la primera de las ferias que conforman ese gran circuito que recorre España.
“Que mi alternativa tenga lugar en una feria repleta de figuras del toreo me llena de orgullo porque es el premio por haber sido el novillero triunfador del año pasado y al ambiente que conseguí el pasado año. Fue una temporada muy completa, especialmente en Las Ventas (donde cortó dos orejas a lo largo de la temporada), varias tardes en Francia, Villaseca, entre otras… Valdemorillo concentra la atención del toreo gracias a la tendencia de estos últimos años, es una gran oportunidad para empezar con buen pie en el escalafón”, se sincera el inminente toricantano.
Toledano, del Castillo de Bayuela, se ha forjado como torero en la Escuela de Madrid: “Entré con 13 años y salí con 20, guardo un recuerdo muy especial porque es donde he crecido como torero y como persona. Estoy muy feliz porque es donde he aprendido que con sacrificio y dedicación se consiguen los sueños”, comenta. Un nuevo matador de toros alumbrado por la Escuela del Batán José Cubero ‘Yiyo’.
En los últimos días se han conocido los carteles de San Isidro donde confirmará la alternativa con toros de Alcurrucén también con Morante y Urdiales. Misma ganadería que en el doctorado: “No he tenido oportunidad de torear muchos animales de esta ganadería con tanta categoría pero si las figuras la matan en las ferias es por algo. Estoy muy motivado, espero que las dos embistan”, se sincera Pulido.
Ha terminado sus entrenamientos de cara a su gran compromiso del inicio del año y de etapa. Descansa con los suyos en El Real de San Vicente, “queda pulir defectos que hemos detectado estos días pero ya de salón, nada más”. Ha comenzado una etapa al lado de Gerardo Roa: “Es un taurino de toda la vida, para mí es una satisfacción que se interesara por mí y ver cómo su confianza en mí como torero se traduce en el lujo de los carteles que me ha cerrado. Ahora depende de mí”, asegura con sensatez.
